Si es un foodie y está en Oporto, está en el lugar adecuado. Siéntese en uno de los muchos locales tradicionales, llenos de deliciosos entrantes, como caldo verde, empanadillas o pasteles de bacalao, sabrosas tablas de quesos o embutidos, pescado fresco y deliciosas carnes. No puede irse sin probar el plato principal de la ciudad, la francesinha, un tipo de sándwich caliente que se sirve con una gran cantidad de salsa, patatas fritas y una cerveza helada.

También encontrará varios estilos de gastronomía para satisfacer todos los gustos o deseos: comida italiana, japonesa, india, francesa, mexicana, vegetariana, etc. Gran parte de la diversión consiste en pasear por las calles, parar en bares históricos y modernos para disfrutar de un café y un trozo de tarta, o entrar en bonitos locales de brunch y, por fin, pero no por ello menos importante, una copa de vino de Oporto para brindar al final de la tarde. A Oporto le encanta comer.